Un trabajo excelente requiere una buena iluminación. Lamentablemente, la luz disponible no siempre es la ideal, ni siquiera en el taller, y mucho menos cuando se trabaja sobre el terreno, donde no siempre se dispone ni de tomas de corriente ni de luces fijas. Pero tenemos la solución: el foco LED recargable portátil de STAHLWILLE.
Nuestro nuevo foco recargable tiene un LED de chip en placa (COB). Esta tecnología, en la que se montan varios LED en una placa de circuitos, produce una luz especialmente brillante gracias a un mayor flujo luminoso. En este caso, un LED COB de 30 vatios proporciona 2.800 lúmenes, más que suficiente para iluminar cualquier espacio de trabajo, ya sea en comercios o en entornos industriales. Los focos son además muy prácticos, ya que pueden hacer algo más que solo encenderse y apagarse: tienen tres niveles de luminosidad diferentes. En función del entorno de trabajo, los usuarios pueden elegir entre utilizar el 25 %, el 50 % o el 100 % de la potencia para garantizar una iluminación uniforme y sin sombras.
Si cree que tanta potencia requiere mucho espacio, ¡Siga leyendo! El foco LED recargable mide apenas 13 x 44 cm y tiene solo 4,4 cm de profundidad. Con solo 700 gramos de peso, el foco es más que portátil. La carcasa IP64 es a prueba de salpicaduras, especialmente ligera y extremadamente resistente a los impactos. Junto con su protección de bordes de plástico resistente a los impactos, el foco es perfecto para el uso portátil en talleres y vehículos de servicio donde las cosas a veces pueden resultar un poco incómodas.
Como cabe esperar de STAHLWILLE, el foco LED recargable ofrece aún más y cuenta con detalles impresionantes y bien pensados. Por ejemplo, una batería recargable integrada de 3,7 V con 6600 mAh, que proporciona energía para hasta 13 horas de funcionamiento. El foco se puede cargar a través de un cable estándar de tipo C, se puede utilizar como un power bank «XXL» y viene con un indicador LED de capacidad. Siempre sabrá cuál es el nivel de carga.
Y eso no es todo: otro aspecto destacado es el mango, que se puede girar 360°. El foco se puede colocar sobre una superficie o colgarse. Una vez encontrada la posición óptima, el mango se fija con un solo movimiento para que el foco permanezca en su posición de forma fiable. Otra característica especialmente práctica es el potente imán integrado en el mango. Con este imán, el foco LED recargable se puede fijar fácilmente a la superficie metálica más cercana; ¡más sencillo imposible!
El foco LED recargable: iluminación flexible para uso profesional. Siempre allí donde lo necesita. Siempre a punto.